A dos kilómetros de Orihuela del Tremedal dirección a Orea cogemos un camino a izquierda. Junto a la balsa de la Toba dejamos el vehículo y comenzamos la ruta.
Seguimos la pista acompañando las marcas del sendero balizado GR-10, obviamos la pista a izquierda que remonta el barranco de Gargantavellanos, ya que será nuestro itinerario de regreso.
Alcanzamos un collao a los pocos minutos, desde el que se divisa Orea. En el cruce de caminos cogemos la pista a izquierda que marca dirección Griegos, siguiendo la variante GR-10.1. Ganamos suavente altura, junto a la pista a mano derecha encontramos un Tremedal, zona donde rezuma el agua. Quince minutos despues nos desviamos a izquierda siguiendo las marcas del GR y abandonando la pista. Pasamos bajo un rio de piedra donde a sus pies se abre camino el pequeño richuelo que recorre el fondo de este barranco. La senda asciende poco definida con marcas bastante perdidas.
Encontramos de nuevo la pista, y enseguida la fuente de Vizalapeña en la que aprovechamos para almorzar. Dos caños de agua fresca nos ayudan a digerir mejor la comida. Continuamos por la pista hasta el collao de Travino que marca la divisoria entre las comunidades autónomas de Aragón y Castilla la Mancha donde la pista finaliza. Un carril entre los pinos, señalizado con infinidad de hitos, nos va acercando irremediablemente hacia nuestro objetivo. Finalmente un agradable paseo nos acerca a este punto de la sierra de Albarracín. Estamos a 1935 metros de altitud, la máxima de la comarca, las vistas son nulas ya que la frondosidad del bosque impide contemplar la sierra. Restos de una antigua torre de vigilancia desmontada, el punto geodésico y un pequeño buzón señalizan la cumbre. Nos encontramos con el dueño del coche que nos adelanto en la pista anteriormente, tocayo de mi padre, me indica por donde puedo bajar en busca del collao de las Latas, una fuerte pendiente nos acerca a un vallado, en esta zona hay que extremar las precauciones ya que es zona de toros bravos.
Encontramos la pista y la tomamos a izquierda. Vamos perdiendo altura, encontramos un nuevo rio de piedras desde el que a sus pies nace el arroyo de Gargantaavellanos, considerado el nacimiento del rio Gallo, este rio nace en la provincia de Teruel y bien pronto cambia de provincia entrando en guadalajara. Abandonamos la pista y acompañamos el arroyo disfrutando de su compañia hasta llegar al área recreativa de la fuente del tio Mantecas. De nuevo en la pista cruzamos la el rio por un puente y alcanzamos el camino por el que esta mañana comenzamos la ruta, 5 minutos más tarde llegamos a la balsa de la Toba, punto de inicio de la ruta.